¡No cuando soy yo!
Llevo una hora y media en el taller. Me jode esperar, pero me jode más esperar para pagar.
Yo como cliente nunca me siento especialmente bien tratado. Aun así, continúo yendo a los establecimientos, porque no tengo más remedio.
Hoy, sin ir más lejos, me han puesto mala cara, a pesar de lo cual me han atendido.
¿Os imagináis un sitio donde, de verdad, se trate al cliente como a un señor? Sería épico.
Ese lugar sería el mejor, tendría el mercado entero a sus pies.