Queridos amigos, no ha de pasar un día sin que un escritor dé a luz, al menos, una línea en su cuaderno o en su archivo de trabajo. Es lo que yo llamo la Regla del Uno. El remedio a la inconsistencia y la parálisis resulta, pues en el cumplimiento de esta regla la menteSigue leyendo «La sociedad, la libertad y la creatividad. Literatura»